Thursday, May 28, 2009

Depeche Mode en Costa Rica


Avance

Ya aparece en la página oficial de la banda la sede del concierto en nuestro país. El Autódromo La Guácima albergará a alrededor de 25.000 devotees este próximo jueves 8 de Octubre cuando el ¨Tour of the Universe¨ realice su única escala en suelo centroamericano.
La gigante productora de conciertos mexicana OCESA (Waters, McCartney, U2, Madonna, entre otros), es quien traerá a Dave Gahan, Martin Gore y Andy Fletcher. La empresa además, está al frente de las dos fechas que tienen en México y otra en Colombia.



Por otra parte Dave Gahan, ha sido operado con éxito de un tumor maligno en la vejiga, que ha supuesto la suspensión de varios conciertos, confirmó hoy la conocida banda británica de música electrónica. Gahan, de 47 años, ingresó el pasado 12 de mayo en un hospital tras sufrir un ataque de gastroenteritis durante la gira del grupo "Tour of the Universe".
"En el hospital, las pruebas médicas revelaron un leve tumor maligno en la vejiga de Daven que se ha extraído con éxito" , indicó el conjunto en un comunicado.
Por prescripción de los doctores, el vocalista deberá descansar hasta el 8 de junio para que su recuperación completa, y ese mismo día regresará a los escenarios en un concierto que se celebrará en Leipzig (Alemania).
"Dave Gahan agradece sinceramente a sus fans su apoyo, comprensión y paciencia", señala la banda, que lamenta "los problemas o inconvenientes que hayan podido causar las cancelaciones o retrasos" de conciertos.
La actual gira del grupo, que ha vendido más de 100 millones de discos en todo el mundo desde su fundación en los años ochenta, arrancó este 6 de mayo como promoción de "Sounds of the Universe" , duodécimo álbum de Depeche Mode y publicado el pasado abril.

Atentos a más detalles...

Fabulosos Cadillacs en Costa Rica


8 años no pasan rápido, tampoco son la eternidad, pero si marcan sin duda un camino que abona experiencias buenas y malas, tropiezos, éxitos y sobre todo madurez (combinación de lo anterior).
Este martes, a las 8 p. m., según estaba anunciado, los Fabulosos Cadillacs volverieron a entonar sus canciones frente al público tico. El estadio Ricardo Saprissa - que sorpresivamente debo confesar, estaba casi lleno- era el lugar para darle la bienvenida de nuevo a la banda rioplatense

Sol, humedad al inicio, lluvia, granizos y tormenta al final de la tarde, no mermaron el impetuo de una masa de seguidores que esperaron desde las 6 a.m. el inicio del recital, aplazado hasta las 9:42 p.m. por problemas con las plantas eléctricas productos de la fuerte rayería en la zona de San Juán de Tibás.

El reloj marcó las 9:15 p. m. y entonces los técnicos destaparon los instrumentos en tarima y se fueron encendiendo las potentes luces del escenario. ¡Sorpresa, sorpresa! Aunque muchos apostaban que por la tardanza ya no habría telonero el cantante JohnnyMan apareció y súbitamente levantó al público; no con aplausos sino con un abucheo y una tiradera de botellas y monedas.

El líder de Mekatelyu fue lanzado a los leones, pues el público recibió como un vaso de agua fría la noticia de que tendrían que esperar más para la llegada de los Cadillacs. La respuesta obtenida seguramente la hubiera sufrido quien quiera que fuera el telonero, pues en las atrasadas circunstancias vividas más bien a JohnnyMan solito le tocó jugársela jugó como un vikingo (rasta) interpretando Páseme la vibra y Paren Paren.

Como si el ambiente no fuera ya suficientemente adverso la participación del músico tuvo que vérselas también contra dos goles de Liberia que fueron gritados en el Saprissa como si hubieran ocurrido ahí mismo (aunque eran en el estadio de Heredia).

Las miradas de medio estadio se volcaron hacia un pequeño televisor ubicado en un palco; al otro lado, JohnnyMan sonreía, brincaba y bailaba como si la ovación fuera para él. Al final el público sí aplaudió su salida del escenario.

De pronto por fin apagaron las luces del recinto. La introducción con el tema del agente 007, sirvió como antesala para que los Cadillacs empezaran su repaso con Manuel Santillán, El León.

Al carajo la final de ¿futbol?, la aparición de un desafortunado telonero y la espera de casi dos horas. Eran las 9:45 p. m. y ya era una realidad; los Fabulosos estaban tocando de nuevo en Costa Rica.

Vicentico, como siempre, lideró a la gran agrupación argentina. Por fin había empezado la fiesta por la que los fanáticos habían apostado desde hace rato. Una gigantesca tarima, 30 luces de cañón en el fondo del escenario y otras más sobre las cabezas de los músicos ambientaron a la numerosa banda.

Vicentico, Flavio, Sergio Rotman, Mario Siperman, Daniel Lozano y Fernando Ricciardi estaban en el escenario junto a otros músicos que completaban la agrupación. Mi novia se cayó en un pozo ciego, Estoy harto de verte con otros y la pegajosa Carmela eran apenas las primeras pinceladas de lo que sería un extenso repertorio.

Pero de repente, y en pleno despegue de concierto: Se fueron los micrófonos! “En cuanto arreglemos esto continuaremos con gusto”, dijo Vicentico, quien hizo casi de moderador durante los minutos de zozobra. La segunda parte de la canción llegó rápido y de nuevo los decibeles subieron; mientras en gramilla el sonido era apenas bueno, en otras locaciones, como sombra, los desperfectos o el poco alcance le aguaron los oídos a los asistentes.

El repertorio siguió con Wake Up and Make Love With Me, El aguijón y Paquito. Flavio corría por todo el escenario con las energías de un niño, haciendo muecas mientras le daba fuerte al bajo, Vicentico protagonizaba un particular baile y Rotman, con su imperdible melena canosa, dirigía los vientos con mucho entusiasmo.



El Saprissa se movía de un lado para otro y el escenario de los Fabulosos iba cambiando de color como si fuera una discoteca. Piezas después, con la llegada de Malbicho, el concierto alcanzó uno de sus clímax. El furor cambió a quietud, cuando Vicentico pidió que el estadio hiciera silencio; el cantante estuvo cerca de lograrlo (siempre los mozotes...), para luego explotar con un ¨digo no, digo no¨ enérgico y vitalizante, luego de varios minutos en los cuales la banda no pudo canalizar el dinamismo y energía propia de los Cadillacs.

“Hay que buscar poder para poder estallar”, había dicho el cantante, y así fue. Satánico Dr. Cadillac (le bajaron como 2 tonos y el enrredo era evidente ante el coro de la gente) se convirtió en el último tema de la lista oficial de los Cadillacs, pero no todo terminaría ahí.

Aunque el repertorio se había recortado en unas cuantas piezas (según el setlist que el grupo acostumbra tocar en esta gira), tras la solicitud del público la banda regresó por más.

Con Basta de llamarme así, Vasos Vacíos (con la cantante puertorriqueña Mimi Maura) y la infaltable Matador (la versión más desabrida y floja que les he escuchado en la vida!)los argentinos demostraron que habían traído buenos regalos para el público.

Una vez más abandonaron la tarima para regresar con Guns of Brixton (de The Clash) y Let’s Lynch the Landlord (de Dead Kennedys). Para estos temas Flavio tomó el micrófono, su pequeño hijo se subió a darle duro a la batería y Vicentico agarró el bajo (mejor sonido de toda la noche).

La velada terminaría con la exitosa Yo no me sentaría en tu mesa, cuyo coro fue el himno durante todo el concierto.

Conclusiones para este servidor (aunque alguno me condene), mal sonido para la clase de banda que son los Fabulosos y la espera fue muy mal manejada por Evenpro. Conversando con varios amigo coincidimos que si bien son unos maestros, siento que la banda ya está buscando más la sobriedad de materiales con madurez y dedicación musical, sobre la brincadera y ruedas vuela patadas.
Muchos tuvimos la dicha de vivir esa época, la disfrutamos y marcamos con un ¨Check¨, por qué no permitirle a los músicos también dejar esa etapa y que quede como un inicio de la gran carrera que tienen.
En definitiva el concierto más grande que han tenido en nuestro pais, no así el mejor.



Fabulosos Cadillacs en Costa Rica
Martes 26 de Mayo, 2009
Estadio Ricardo Saprissa


1. Intro (James Bond Theme)
2. Manuel Santillán, el León
3. Mi novia se cayó en un pozo ciego
4. Carmela
5. Estoy harto de verte con otros
6. Genio del dub
7. Wake Up and Make Love with Me
8. Muy, muy temprano
9. El aguijón
10. Paquito
11. Padre nuestro
12. Saco azul
13. Siguiendo la luna
14. La luz del ritmo
15. Demasiada presión
16. V Centenario
17. Calaveras y diablitos
18. Gitana
19. Carnaval toda la vida
20. Mal bicho
21. Satánico Dr. Cadillac
22. Basta de llamarme así
23. Vasos vacíos
24. Vos sabés
25. Matador
26. Guns of Brixton
27. Let’s Lynch the Landlord
28. Yo no me sentaría en tu mesa

Tuesday, May 19, 2009

Los Redonditos de Ricota


Advertía Umberto Eco, allá en 1962, que el arte contemporáneo se presenta como una metáfora epistemológica de nuestro tiempo, describiendo la manera de ver el contexto en que se vive, con totalidad de elementos y en su plenitud de actualidad. Pero al mismo tiempo, se manifiesta como obra abierta, y a veces, en movimiento. Casi nadie duda que algunas producciones artísticas demandan la imprescindible e ineludible participación interpretativa del gozador de las mismas, recayendo en el momento de la recepción la especial atención del creador al momento de imaginar el proceso de generación.

El rock and roll, como expresión artística y objeto de cultura, tolera diversos análisis, y además, hace posible profundizar en la intención estética de algunos creadores que concientemente han buscado provocar interesantes efectos al presenciar sus obras. Pero vayamos al universo del rock. A la esfera de los que trascendieron el nivel de la inmanencia musical, y revolucionaron el campo del pensamiento, aproximándose al ámbito de reflexiones propias de filósofos (¿?).

Desde el underground, allá en La Plata, una banda rockera liderada por el mítico e inexistente Patricio Rey. Ocho años después debutaban discográficamente, presentándose como un grupo de visión crítica y ambigua poesía, en la que profundizan todas las temáticas que preocupan al hombre, y que en clara alusión a la posmodernidad, y a lo vertiginoso y efímero del ¨stardom system¨ y el ¨rock business¨, nos dicen que hay caballos que se mueren potros sin galopar. Su indiscutido ideólogo, el Indio Solari, se revela como un lúcido pensador, que a la manera de lo anticipado por Umberto Eco, compone temas de ambigua poesía de la que reconoce que al escribirla imagina que sus gozadores será libres como para digerir un lenguaje que tiene la suficiente cuota de múltiples significados como para involucrarlos, porque el poeta debe ser metafórico, enigmático y misterioso (?¿).

En 1986 editan Oktubre, remitiéndonos a la Rusia zarista de 1917 y a su revolución de Oktubre, aunque el mismo Solari se encargue de negar esta relación, tal vez con la intención de dificultar una interpretación unívoca. Como sucede ante la oportunidad de presenciar una obra de arte, o de rock, abierta en su esencia, en un concierto. Por ahora, la única manera de ver a Los Redonditos de Ricota es asistir a una de sus presentaciones, especie de ritual, mitad religioso, mitad pagano, en el que Solari es un chamán, un parco brujo tribal que cura con su esperada palabra y su fascinante danza a las atentas bandas, dispuestas a recibir el mensaje de un creador cuya clave de interpretación puede jugarse en una sola frase, donde un joven lobo se puede quemar de amor.

En el universo del rock parece como poco menos que impensable que duros e inconmovibles músicos, disconformes y rebeldes por definición, dediquen memorables páginas al tema del amor, esa locura, esa poderosa deidad que mueve a querer conquistar aún lo imposible, aunque se sufra y gradualmente nos vayamos destruyendo. Pero de eso se trata no? "¿Vas a volver a herirme? En tu ternura está acechándome una buena traición de mujer. Sobrio no te puedo ni hablar, y estoy perdido sin mi estupidez. Y porque dos que se quieren se dicen cualquier cosa", y no olvida que su amor todavía le dá descargas. O también puede confesar que: "Ella sí que era el fuego,/ ella sí que bailaba en las llamas./ Por primera vez tengo miedo de no hacer bien mi papel./ Yo ya no puedo partir./ Me ata un fuego y mi sueño duerme aquí". Y este semidios posmoderno de la comunicación vibra pensando en Ángeles, o en La hija del fletero. Todas y una. Siempre la misma. Porque "ella fue la más linda del amor/ que un tonto ha visto soñar".

No olvidemos que en la antigüedad, la reflexión filosófica no exigía un lenguaje difícil con pretensión de interpretación única, porque cuando se busca analizar el sentimiento, los conceptos lo desbordan y requieren una comprensión casi mística, debiendo utilizar la metáfora, posibilitando imaginar lo irrepresentable, como los Redondos, que en su hasta hoy último álbum conceptual, ¨Lobo suelto, cordero atado¨, a la manera de Demian de Herman Hess y su divinidad maniquea Abraxas, nos plantea que en todos nosotros conviven al mismo tiempo el bien con el mal, el pecado con la virtud, y a un ladrón lo puedo matar con mi amor. Y en el marco del juego del poder, algunos se la creen. Tuvieron un golpe de audacia, y se la dieron de timberos fogosos y feroces, de esos que nunca muestran todo el mazo. Y hoy comen la gran manzana. Y no te dejan ni pepita.

Ya es indudable, por todo lo expuesto, que el Indio Solari, con los Redonditos de Ricota, ha tomado especialmente en cuenta la anticipación pragmática que realizara Eco en ¨Obra Abierta¨, en 1962 (adjunto el link, no la biblioteca), imaginando un lector modelo ejerciendo actos de libertad conciente para una obra que se presenta como abierta, a veces en movimiento, e invariablemente como metáfora epistemológica de nuestro tiempo.

Los que tienen prejuicios acerca de los creadores del rock podrían pensar que al Indio le resultan las letras de sus temas con una ambigüedad rebuscada como consecuencia de la casualidad, pero ya lo explicó: "En los regímenes totalitarios la retórica, que es uno de los aspectos fundamentales del lenguaje, suele ser dejada de lado para privilegiar un lenguaje llano y directo que no dice nada de los matices que tiene la vida... Si tuviera que escribir poesía con resoluciones me dedicaría a otra cosa. "

Tuesday, May 12, 2009

Aquel 14 de Abril del ´94...


Algunos recuerditos de aquel memorable 14 de abril del ´94, fecha que se presentó en el Gimnasio Nacional de la Sabana la banda Depeche Mode, como parte de su ¨Exotic Tour¨ (leg latinoamericano del ¨Devotional Tour¨).
El setlist fue:

1. Rush
2. Halo
3. Behind the Wheel
4. Everything Counts
5. World in My Eyes
6. Walking in My Shoes
7. Stripped
8. Condemnation (Martin Gore)
9. Judas
10. Somebody (Martin Gore y Alan Wilder con un piano de cola)
11. In Your Room
12. Never Let Me Down Again
13. I Feel You
14. Personal Jesus
15. It Doesn´t Matter Two

Encore 1

16. Fly On The Windscreen
17. Enjoy the Silence

Encore 2

18. Policy of Truth
19. A Question of Time



De más está la invitación para el próximo evento Devotee, el cual será en el nuevo Bar Morita y será amenizado por Billy, Fabián y este servidor (aaayyy carajooo...). Consistirá en lo mejor de la discografía de DM, rarezas, live sessions, proyectos solistas, entre otros...